miércoles, 27 de febrero de 2013

La felicidad. Carlos Salem

La felicidad debe ser
algo así
como encontrar tu tanga gris
entre los folios de la novela
que no me decido a terminar,
besarlo sin que me vea el gato
y perderlo otra vez
para encontrarlo de nuevo.

La felicidad debe ser
algo así como tenerte
y sin embargo
y extrañarte de antemano,.
O que si te sientas frágil
acolchada de dudas,
me pienses y te bese
rotunda
mi certeza.

La felicidad es un gato
que juega a deshoras
en nuestra  cama,
porque para jugar y ser feliz
no cuentan los horarios
solo las ganas.

Y ganas nos sobran.
Pero allí estaba ella.
Entre mitad del gentío.
Y yo quería gritar.
Gritar que se quedase,
pero mi miedo
hablaba más fuerte que el bullicio.
Y se fue y tuve la oportunidad entre mis dedos.
Esto no es sano, y lo sé.
Y cualquier camino tomado para olvidar todo
no sería permitido por cualquier profesional
de la medicina, pero es la única manera que he encontrado.
Disfruto del dolor y sé que si algún día realmente
la llegase a conocer nada sería lo mismo.
Sueño con su forma de ser pero creo que realmente no quiero conocerla.
Consumir misterio me produjo adicción,
no creo que esté preparado para comenzar la recuperación.

lunes, 18 de febrero de 2013

Y sé que debería de dejarlo pasar, de hecho,
me creo incapaz de ejecutar cualquier movimiento
cuando,frágil, el tiempo me quiere vencer.
Pero de nuevo me viene esa sensación
de que soy capaz de todo y de nada cuando la tengo en frente.
Y todas esas sensaciones me hacen seguir.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Agarrada a un fino hilo de aire porque aquí ya no quedaba nada más que ganar. Sólo era un rostro de los miles que formaban parte de la rutina. Con una lágrima atragantada ya de hace tiempo caí en la cuenta de lo superficial que era todo y de lo mucho que necesitaba sentir ese calor.
La puta primavera a la vuelta de la esquina y yo seguía atrapada en un final de verano un tanto desconcertante.